Dermatol Rev Mex. 2018 noviembre-diciembre;62(6):506-515.
Adrián Bernardo Cuellar-Barboza, Jesús Alberto Cárdenas-de la Garza, Adrián Martínez-Moreno, Irving Llibran Reyna-Rodríguez, César Daniel Villareal-Villarreal, Jesús Ancer-Arellano, Jorge Ocampo-Candiani, Osvaldo Tomás Vázquez-Martínez
Universidad Autónoma de Nuevo León, Facultad de Medicina. Servicio de Dermatología, Hospital Universitario Dr. José E González, Monterrey, Nuevo León, México.
Resumen
Los glucocorticoides son hormonas esteroideas que coordinan la respuesta sistémica al estrés de tipo físico, químico o biológico. Participan en la fisiopatología del acné vulgar porque contribuyen a la producción excesiva de sebo; sin embargo, en la práctica diaria se prescriben como agentes terapéuticos por su efecto antiinflamatorio y antiandrogénico. En el acné inflamatorio severo pueden administrarse corticoesteroides orales, principalmente prednisona, a dosis bajas durante dos a tres semanas al iniciar el tratamiento con isotretinoína con el objetivo de disminuir potencialmente brotes inflamatorios. En acné nódulo-quístico o cicatricial el acetónido de triamcinolona puede administrarse de forma intralesional a dilución de 2.5 a 10 mg/mL en lesiones quísticas y 10 a 40 mg/mL en cicatrices queloides, cada dos a tres semanas. En el acné fulminante la prednisona juega un papel fundamental y debe administrarse a dosis de 0.5 a 1 mg/kg/día, con duración de por lo menos dos a cuatro semanas previo al inicio paulatino de isotretinoína. Los corticoesteroides orales a dosis bajas pueden considerarse monoterapia en pacientes con hiperandrogenismo suprarrenal bien documentado. Los corticoesteroides pueden prescribirse en escenarios clínicos específicos de acné; sin embargo, hacen falta estudios clínicos controlados para definir las dosis óptimas, tiempo de duración del tratamiento, agente preferible y perfil de seguridad de estos agentes terapéuticos.
Palabras clave: Corticoesteroides; glucocorticoides; prednisona; triamcinolona; acné inflamatorio; acné fulminante; isotretinoína; hiperandrogenismo.